Un grupo de más de setecientos creadores e investigadores han sido los primeros firmantes de un manifiesto reivindicativo que apuesta por la necesidad de interactuar con la realidad social a la que nos enfrentamos, para desde una actitud fraternal coadyuvar a su transformación, mediante la propuesta que propugna una respuesta ética y estética a la equívoca situación en la que se ven inmersas las sociedades contemporáneas.
Entre estos firmantes se encuentran artistas y estudiosos de diversas nacionalidades, tan relevantes como Antonio Gala (España), Antonio Hernández (España), Luis García Montero (España), Claribel Alegría (Nicaragua), Federico Díaz Granados (Colombia), Bernard Sesé (Francia), Luis Landero (España), Marina Bianchi (Italia), Mohamed Néjib ben Jemia (Túnez), Andrés Alcántara (España), Salvador Compán (España), Horia Badescu (Rumanía), Mohamed Doggui (Túnez), Rafael de Cózar (España), Michéle Ramond (Francia), Abderrahman El Fathi (Marruecos) o Rafael Guillén (España), entre otros.
Se sienten copartícipes de una corriente crítica e intelectual de personas libres que, desde la heterodoxia estética, asumen el uso de la palabra y de la actividad creadora como obligación social bajo los irrenunciables principios de la reivindicación del compromiso y del comportamiento ético, sin estar sometidos a ideología, filosofía, política o religión alguna, rebelándose contra los sistemas y organizaciones que oprimen y asfixian a la mayoría de la humanidad. Ajenos toda ideología dominante, los firmantes propugnan el destierro del pensamiento único en cualquiera de sus manifestaciones, fundamentando sus principios rectores, y su obra individual y colectiva, sobre los términos morales que emanan de la idea irrenunciable de la fraternidad universal y de la unidad profunda de la humanidad.
En un momento tan convulso como el que nos está tocando vivir, lleno de tránsitos y de cambios, adherirse al Manifiesto de Humanismo Solidario significa optar por la reivindicación del compromiso y asumir la necesidad de construir un replanteamiento esperanzado de la actividad crítica y creadora que contribuya a la creación de los resortes de una nueva educación de la subjetividad, de una nueva educación sentimental que se fundamente en los términos morales que emanan de la idea irrenunciable de la fraternidad universal y de la unidad profunda de la humanidad.
El objetivo de esta Plataforma es la de conseguir un compromiso voluntario con el Manifiesto de Humanismo Solidario, a fin de hacerlo público ante organizaciones de todo tipo a los que se hará llegar el testimonio de resistencia alternativo que supone la corriente de Humanismo Solidario.
Humanismo solidario es una corriente crítica e intelectual de personas libres que, desde la heterodoxia estética, asumen el uso de la palabra como obligación social bajo los irrenunciables principios del compromiso y el comportamiento ético, sin estar sometidos a ideología, filosofía, política o religión alguna.